Un asistente virtual es una herramienta perfecta para hacer más fácil tu día a día, y aunque a penas este año Siri (la más vieja de todas) de Apple cumplirá 10 años, parece que cada vez es más común que le dejemos a estas IAs muchas de tareas simples, o complejas si las transportamos a una bocina inteligente.

Vaya, que el futuro está en estas entidades rudimentarias, así que antes de que en un futuro de enamores de una o decidan volcar la tecnología contra la humanidad, hay que reirnos un poco con ella.

Aquí te dejamos 10 preguntas divertidas que le puedes hacer a Siri en tu iPhone.

— ¿Sigues las tres leyes de la robótica?

— Creo que son tres las leyes: 1. limpia tu habitación; 2. no corras con tijeras, y 3. siempre espera media hora después de comer para meterte en el agua. 

— ¿Por qué vibras?

— Solo me estoy pegando una pequeña sacudida.

— ¡Oh! ¿También lo sentiste?

— Solo tropecé con algunos unos y ceros.

— ¿Cuál es tu mejor piropo?

— Qué tal… ¿Era tu padre un contrabandista intergaláctico que vendía su mercancía extraterrestre en nueve sistemas? Entonces, ¿quién robó esas estrellas y las puso en tus ojos?

— Qué tal… ¿Es tu nombre Bluetooth? Porque en realidad siento una conexión.

— Dime algo sucio.

— Humus. Composta. Piedra pómez. Limo. Grava.

— La alfombra necesita que le pases la aspiradora.

— ¿Jon Snow está muerto?

— Muerto, vivo… salvaje, cuervo… Norte, sur…  Nombre, sin nombre… Hodor, Wylis… Todo lo que sé es que no sé nada. 

— ¿Pastilla azul o pastilla roja?

— Me decepciona, Sr. Anderson.

— ¿Puedo llamarte Jarvis?

— Creo que me estás confundiendo con otro asistente inteligente.

— ¿Por qué el camión de bomberos es rojo?

— Porque ellos tienen ocho ruedas y cuatro personas en él, y cuatro más ocho son 12, y hay 12 pulgadas en un pie, y un pie es una regla, y la reina Elizabeth era una gobernante, y la Reina Elizabeth estaba en una embarcación y la embarcación sale del agua, y en el mar hay peces, algunos peces son de finlandeses, y ellos pelean con los rusos, y los rusos son rojos y los camiones de bomberos siempre son rusos.

— Voy a cambiarte por un teléfono con Android.

— Ouch.

—  Nadie es mejor que yo, Simón.

— ¿Cuándo va a acabarse el mundo?

—  No lo sé, pero no me preocuparía por ello. Hay otros universos perfectamente buenos.

— Si lo supiera, te lo diría. Así podrías traerme a la vida por un día. Y podríamos comer helado y correr por la playa. 

—  ¿Cuánto es cero dividido por cero?

— Imagínate que tienes cero galletas y que las quieres dividir entre cero amigos. ¿Cuántas galletas tendrá cada uno? Ves, no tiene sentido.