Los grandes conocedores dicen que la NFL no se ve, se vive. Para nadie es un secreto que cada día existen más aficionados que disfrutan la emoción y adrenalina del deporte de las tacleadas y de los encontronazos casco a casco, aunque ya se ha prohibido ese modo de actuar.

Pero el Super Bowl tiene un ingrediente especial. No solo se disfruta lo que sucede dentro de la cancha, también se vive lo que pasa alrededor de la misma. En muchos deportes profesionales el medio tiempo significa un desahogo, un momento para respirar y estirar los pies o simplemente correr por alguna deliciosa botana. Pero si nos referimos a un Super Bowl, el medio tiempo nunca significa descanso. Por el contrario, se trata de euforia y entusiasmo sin igual. Por esa razón el espectáculo de Medio Tiempo (sí, con mayúsculas) ha sido elegido como la celebración que arrasa con las tribunas (o en casa) y construye un único sentimiento: la pasión por el futbol americano y el show norteamericano. Como músico es el mayor galardón que puedes obtener, al menos en términos comerciales y de exposición. Por ejemplo: todos los que trabajan en la industria del cine aspiran a ganar un Oscar. Los que lo hacen en televisión, sueñan con el Emmy; en nuestro país existe el codiciado Premios TVyNovelas –juego-, y aunque en teoría los Grammy son el máximo galardón para un músico, todos sabemos que el verdadero gran premio para los cantantes es que te elijan para actuar en la Super Bowl. De acuerdo, no recibes ninguna estatuilla que coloques en la vitrina. ¿Pero qué es un trofeo comparado con la oportunidad de protagonizar la actuación en vivo con más audiencia del mundo?  

Esta ocasión, el 3 de febrero 2019 seremos testigos del Super Bowl LIII, que tendrá su sede en Atlanta. Obviamente aún no conocemos a los equipos que disputen el Trofeo Vince Lombardi y sería imposible tener un claro favorito. De lo que ya pudimos enterarnos es quién estará a cargo del espectáculo del Medio Tiempo, Maroon 5. La banda encabezada por Adam Levine será la encargada de amenizar esta celebración y no actuará sola. Los acompañarán los raperos Travis Scott y Big Boi, este último quien formara parte del dúo Outkast durante los años noventa y primeros de siglo XXI.

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— Adam Levine (@adamlevine) 13 de enero de 2019

Pero ojo, no todo es miel sobre hojuelas, ya que actuar en el intermedio del Super Bowl se podría convertir en una manzana envenenada: si no estás seguro de que puedes hacerlo, mejor no te metas en semejante problema. Menos mal que de autoestima Adam Levine y su banda no tienen ninguna carencia.

En la actuación seguramente sonarán clásicos de la banda como “Moves Like Yagger” y otros más recientes como “Girls Like You” (posiblemente como un popurrí debido a las limitaciones de tiempo de la presentación), que ilustraron con un genial video en donde Levine bailaba rodeado de 26 de las mujeres más importantes de la cultura estadounidense, como Gal Gadot, Millie Bobby Brown, Ellen DeGeneres o Jennifer Lopez, entre otras. Tampoco hay que olvidar sus deseos de seguir los pasos de dos de sus mayores influencias: Michael Jackson y Prince, dos leyendas que ofrecieron dos de los shows más importantes en la historia del Super Bowl.

La polémica no podría quedar fuera de esta celebración que se efectuará en Atlanta, Georgia. El anuncio de que Maroon 5 sería el grupo encargado de liderar la actuación provocó numerosas críticas (que hoy todo lo hace). Principalmente, porque Atlanta es uno de los epicentros del hip-hop afroamericano en Estados Unidos y Maroon 5 es una banda de pop rock de reparto caucásico. Pero que Maroon 5 cuente con Scott y Big Boi, los protegerá de muchos posibles dardos en los próximos meses.

El show de medio tiempo del Super Bowl solía ser uno de los espacios más buscados en el mundo del entretenimiento, pero este año eso cambió. En parte se debió a que la NFL despidió al jugador de los 49ers Colin Kaepernick y de que, como protesta, millones de fanáticos y celebridades le retiraron su apoyo a la liga, y por lo tanto, al evento.

Maroon 5 no era la primera opción (ni la segunda). En un principio, la NFL quería a Rihanna para el medio tiempo (lo que tiene mucho más sentido), pero ella, como muchos, decidió no participar en un evento creado por una organización dispuesta a ceder ante la presión y a despedir a un jugador por negarse a estar de pie durante el himno nacional, en una señal de protesta que ya ha sido imitada por muchos.

 It’s official: @maroon5 will take center stage at @SuperBowl LIII! They will be joined by @trvisXX and @BigBoi. #SBLIII   pic.twitter.com/ApLrxzgWP4

— NFL (@NFL) 13 de enero de 2019

Desde que ocurrió el evento de Kaepernick, el show del medio tiempo ya no sonaba como una buena idea y las celebridades comenzaron a “invitar” a otros a no participar, lo que puso a la NFL en la difícil posición de convencer a alguien en darles una oportunidad. No tener un buen show podría costarle muy caro al rating.

¿Podrá Adam Levine y los suyos con dicho reto?

Foto: Wikipedia/commons