David Bowie ha sido un agente de cambio en la cultura contemporánea. Más allá de la música, su manera de presentarse públicamente ha dejado también su huella. La importancia de Bowie como ícono de estilo es casi tan poderosa como amplia es su carrera. 

Nadie podría asegurar que Bowie haya desaparecido. Todos, aparentemente, saben quién es, o fue, David Bowie. Sin embargo, cuando la pregunta cambia a: ¿qué es David Bowie? La respuesta se complica. Si buscamos en internet las siguientes definiciones se remontan a: Leyenda del rock, músico, diseñador, modelo, actor, artista y escritor, algunas de las respuestas que encontrarás. Lo cierto es que su legado rompe barreras y parece difícil de explicar o sintetizar. 

Hoy, 8 de enero de 2020 sería la fecha cuando esta leyenda del rock y maestro de las vanguardias celebraría su cumpleaños 73. Además, el viernes 10 de enero se cumplen cuatro años de la muerte de este artista, por lo que ahora sus amigos, colaboradores más cercanos y fieles seguidores serán los encargados de no olvidar esta fecha. 

Dueño de una carrera camaleónica que tuvo como común denominador la noción de acercar las vanguardias a la masividad, el legado de Bowie es tan extenso como lo fue su propia obra. Por eso nos enfocaremos en su último legado.

El último gran legado de Bowie 

Si para el budismo el tiempo físico no existe, para Bowie, fiel seguidor de esa doctrina, el final no se reduce solo a su álbum final, Blackstar (2016), en cuyas letras se hallan diversas pistas alusivas al tránsito de su autor hacia lo desconocido.

Es increíble cómo un acontecimiento puede cambiar por completo la percepción de una obra. Tras el inesperado fallecimiento del gran Bowie, buena parte de las reseñas que se habían escrito sobre Blackstar, vigésimo quinto y último álbum de estudio del músico británico, publicado el 8 de enero de 2016, para coincidir con el aniversario número 69 del artista (dos días antes de su fallecimiento), de un día para el otro se volvieron obsoletos.

“Mira hacia arriba, estoy en el cielo/Tengo cicatrices, que no pueden ser vistas/ No me queda nada que perder”. Con estas líneas comienza “Lazarus”, el segundo sencillo de Blackstar. 

Teniendo en cuenta que el espacio exterior fue un tema recurrente en sus composiciones (“Space Oddity”, “Starman”, “Life On Mars?”), por lo general haciendo alusiones a los espacios y vacíos interiores del ser humano, no sería raro que Bowie se viera a sí mismo como una estrella que se apaga y pasa a la perpetuidad. También es probable que se trate de un guiño a Elvis Presley, máximo héroe del cantante y con quien compartía fecha de cumpleaños. Existe una canción poco conocida de El Rey titulada “Black Star” que decía “Todo el mundo tiene una estrella negra sobre sus hombros y cuando un hombre ve su estrella negra, sabe que ha llegado su hora”.  

Para celebrar la obra y vida de Bowie, el día de hoy se anunció David Bowie, Is It Any Wonder, un EP de seis grabaciones (algunas inéditas) que se irán publicando sólo para streaming durante las próximas seis semanas.  

La primera de ellas se trata de una versión inédita del tema “The Man Who Sold The World”.  

La canción, que en algún momento interpretara en versión cover el fallecido Kurt Cobain (1967-1994) del grupo Nirvana, ofrece unos arreglos musicales distintos a la versión original. También podemos escuchar la remasterización del clásico de David Bowie en su propia voz, justo como si aún se encontrara vivo. 

Las siguientes 5 pistas que componen el EP David Bowie Is It Any Wonder? serán publicadas cada semana a partir del 17 de enero de este año.  

Foto: https://es-la.facebook.com/pg/davidbowie/photos/.