Como parte del proyecto Chapultepec, Naturaleza y Cultura, la Secretaría de Cultura del Gobierno de México, el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (Inbal) y el Gobierno de la Ciudad de México inauguraron este jueves el Jardín Escénico, cuya vocación responde a las nuevas expresiones y necesidades contemporáneas de las artes escénicas e impulsa un diálogo de sustentabilidad con la recuperación de 7 mil metros cuadrados de bosque, que durante muchos años fue utilizado como estacionamiento.

En su mensaje, la secretaria de Cultura federal, Alejandra Frausto Guerrero, destacó que el Jardín Escénico –que contiene el Pabellón Escénico y el Laboratorio de Creación Escénica– es parte del proyecto Chapultepec, Naturaleza y Cultura, el cual unifica las cuatro secciones del bosque, con una inversión de más de 10 mil millones de pesos, que atiende la zona y la infraestructura existente, y aprovecha espacios que eran subutilizados. 

“Estamos en un lugar que era un estacionamiento y ahora nace este espacio para la creación, para la libertad. Que se abran nuevos espacios es fundamental, así como que se atiendan los que tenían necesidad de ser atendidos, como el Centro Cultural del Bosque, donde invertimos 280 millones de pesos, para la recuperación y dignificación de los espacios para las artes escénicas”.

Así, el Jardín Escénico abrirá sus puertas a las distintas manifestaciones de las artes escénicas de todo el país y del mundo, en beneficio de las y los visitantes del Bosque de Chapultepec.

En su mensaje, agregó que, bajo la coordinación del Inbal, la presentación de actividades en este espacio empezará con artistas del Sistema de Apoyo a la Creación y Proyectos Culturales (antes Fonca) con programación para conmemorar el 8 de marzo.

“Chapultepec, Naturaleza y Cultura ha logrado que nazcan nuevos nodos culturales. Aquí van a llegar los grupos artísticos de toda la República, como están llegando a Los Pinos, al Centro de Cultura Ambiental y a otros espacios que ya están listos… Se puede ir transformando al país poco a poco o a grandes pasos cuando se tiene voluntad, cuando el dinero se invierte de manera honesta, cuando tenemos la posibilidad de poner al centro a las personas. ¿Y cuál es el mayor beneficio que pueden tener a través de las artes? Este, los derechos culturales para todos”, afirmó.

Por su parte, el jefe de Gobierno, Martí Batres Guadarrama, precisó que para la transformación de un estacionamiento en este nuevo espacio se intervinieron 59 mil metros cuadrados, se construyó un pabellón de ensayos, una cafetería y se instalaron 14 mil metros cuadrados de áreas verdes con 128 árboles nuevos, 90 mil plantas, así como humedales y senderos peatonales para el disfrute de visitantes nacionales e internacionales.

“Como ciudad, con esta gran construcción, podemos invitar a habitantes de otros lugares del país y del mundo a visitarnos. Por lo tanto, nos permitirá tener un punto de atracción universal. Como ciudad, también damos un paso firme hacia una visión cultural, ambiental, que permite, podemos decir, nuestra liberación personal y colectiva y el ejercicio de nuestra libertad. (...) El proyecto enlaza virtuosamente la visión ambiental con la construcción cultural. Estamos hablando de un complejo con un conjunto de nuevos nodos que tendrán una intensa vida cultural y social”, expresó.

El Gobierno capitalino, añadió, a través de la Secretaría de Gobierno hizo posible la gestión para la transformación de 52 puestos de comercio ambulante en zonas de venta establecidas; al tiempo que reconoció el esfuerzo realizado por las secretarías de Obras y Servicios (Sobse), y del Medio Ambiente (Sedema), así como de Cultura del Gobierno de México, para hacer posible la materialización de este recinto.

Para el premio nacional de Artes y Literatura 2023, Claudio Valdés Kuri, el Centro Cultural del Bosque está en el ombligo del país y es sin duda uno de los centros culturales más emblemáticos y activos, no solo de la nación, sino de todo el continente, y externó: “Aquí se producen y presentan creaciones de artistas de toda procedencia para el público de la Ciudad de México y de los muchos que la visitan. Al entrar, nuestro cuerpo habita una estimulante experiencia arquitectónica y escultórica en la que dialogan diferentes épocas.

“Idealmente hemos sido transformados por la experiencia estética, ya sea teatral, musical o dancística; ya no somos los mismos, hemos sido tocados por la inspiración y nos hemos nutrido con nuevas líneas de pensamiento que compartiremos con otras personas, expandiendo las reflexiones generadas en este oasis enriqueciendo el pensamiento colectivo.

“Y ahora, este entrañable espacio se amplía y une para nuestro disfrute, el arte y la naturaleza; al ser dotado de nuevos e inspiradores recintos de creación y presentación interdisciplinaria y de convivencia se interconecta audazmente con el resto del Bosque de Chapultepec, dejando de ser una isla y enarbolando como nunca antes su nombre: Centro Cultural del Bosque”.

A la inauguración también asistieron la directora general del Inbal, Lucina Jiménez López; el subdirector general de Bellas Artes, Héctor Romero Lecanda; la subdirectora general de Patrimonio Artístico Inmueble, Dolores Martínez Orralde; la directora general del Centro Cultural Helénico, Haydeé Boetto Bárcena, así como los coordinadores nacionales de Teatro y de Danza, Daniel Miranda Cano y Nina Serratos Zavala, respectivamente, entre otros.

Al término de la inauguración, la titular del Inbal se reunió con la planta técnica de los nuevos espacios y directivos de otras dependencias del Sector Cultura para conversar sobre las colaboraciones y confluencia de programación de las distintas instancias del Inbal y de la Secretaría de Cultura para generar un discurso común en el Pabellón Escénico y el Laboratorio de Creación Escénica.

Arte escénico y naturaleza en diálogo

El concepto de este nuevo espacio fue creado por el Inbal con base en un minucioso diagnóstico en torno a las artes escénicas que se congregan en el Centro Cultural del Bosque (CCB), lugar donde se construyó la modernidad del teatro mexicano y que había quedado fragmentado y aislado y que ahora con el Jardín Escénico se integra al bosque, como punto  de conexión y encuentro para  las diferentes audiencias que podrán disfrutar de puestas en escena en espacios públicos de danza, teatro, música y expresiones multidisciplinares.

Este proyecto arquitectónico, natural y escénico de la Secretaría de Cultura federal, coordinado a través del Inbal, es considerado único en su tipo en México y en América Latina, y beneficiará a artistas independientes, estudiantes y comunidad en general.

Asimismo, las comunidades estudiantiles de las escuelas superiores en artes del Inbal, al igual que las diferentes comunidades artísticas, tendrán un punto de convivencia e intercambio de experiencias a través encuentros artísticos a realizarse a lo largo y ancho del Jardín Escénico, proyecto del arquitecto mexicano Isaac Michan, resultado de un concurso público.

Este espacio sustentable desde su diseño dio prioridad a las áreas verdes, en un total de siete hectáreas que contarán con únicamente tres edificaciones, dos de ellas para la presentación y la exploración de artes escénicas y una cafetería, en medio de un paisaje reconstruido con especies nativas y polinizadoras, en donde se ha cuidado exprofeso la condición del arbolado.

Para que los públicos puedan disfrutar de la programación que el Inbal llevará a cabo se cuenta con el Pabellón Escénico totalmente equipado y cuya estructura permite ver el escenario desde tres puntos del edificio al dejar abiertos en su totalidad sus ventanales para que, desde los taludes y jardines que lo rodean, el público pueda disfrutar de las funciones.

Por otro lado, se construyó el Laboratorio de Creación Escénica que tendrá la función trascendental de la práctica profesional, la experimentación y la producción de proyectos artísticos contemporáneos. También se promoverán encuentros interdisciplinarios para fortalecer el ecosistema de las artes escénicas.

Con una visión medioambiental, el Jardín Escénico cuenta con un humedal, diseñado para captar el agua pluvial proveniente de los pabellones y el cual no solo contribuirá a la gestión sostenible del agua, sino que añadirá un elemento de belleza natural al paisaje que cuenta con senderos y jardines.

También será el punto de llegada y salida de la segunda Calzada flotante –Chivatito– para conectar con el Parque Rosario Castellanos, en donde permanece una obra escultórica de la artista María Lagunes; sitio idóneo para la literatura, como fue planeado en su origen por el Inbal.

Cabe destacar que se respetó en todo momento el diseño de paisaje para que el terreno mantenga condiciones de permeabilidad y cuidando las especies de flora y arbolado originarias de la zona de Chapultepec y fortalecer la diversidad biológica de la ciudad.

Información. Dirección de Prensa de la Secretaría de Cultura. Fotografías: Edoardo Esparza Chavarría / Secretaría de Cultura