La moda siempre es un reflejo de la sociedad aunque las tendencias de primavera-verano gritan escapatoria y felicidad, las pasarelas no siempre son la fantasía que nos hace olvidar el mundo en el que vivimos. Ya sea en un minuto de silencio por Ucrania en Armani o en el Armagedón más directo que se mostró en Balenciaga, ahora más que nunca la industria de la moda está reaccionando al mundo en todas sus dicotomías.

Este otoño/invierno se pone más serio y se mira a sí mismo desde un regreso al arte de la vestimenta femenina como respuesta a tantos meses en pantalones de chándal, de abrigos de bata como de cuidado personal, hasta vibras ecuestres que nos ayudan a todos a regresar a la naturaleza. 

Las tendencias reflejan nuestro mundo ahora, o haciéndolo todo un poco más bonito y deslumbrante, para ayudar al trato colectivo.

El negro es el nuevo negro

Las fiestas y la vida nocturna en general han regresado, y cuando llega el manto oscuro de la noche, el mensaje es claro para los diseñadores: es hora de volver al negro. El negro siempre será el color clásico para vivir la noche. 

No te preocupes, que este negro de otoño 2022, no es lúgubre, sino que atrae las miradas con brillo con S mayúscula. Esta tendencia prefiere las lentejuelas, lo holográfico, las texturas.

Bomber de todo tipo

Las bomber jacket han estado entre nosotros desde hace varias temporadas, pero esta vez regresan en su modo aviador. Tal vez impulsadas por la película Maverick, tal vez sólo queríamos un cambio pero continuar con la misma vibra, no lo sabemos.

Pero esta temporada se busca este corte en cuero, y literalmente va con todo. Si deseas algo calentito para finales de año, la piel de oveja es una buena opción.

El poderío de las tank top

 

 

 

 

 

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Regresamos a los 1990s y 2000s, donde las heroínas de acción usaban tank tops. Esta prenda sin mangas y de tirantes, ha estado constante en este año y ni siquiera el frío de la temporada la sacará de circulación. Es un básico imprescindible y combina bien con casi todo. 

Con faldas como las de Prada, con Jeans como las de Bottega Veneta, con pantalones de cuero como los de Chloe. El cielo es el límite, y a veces los clásicos son demasiado buenos como para dejarlos aunque haga frío.

FOTO: Philipp Arlt en Unsplash