Hoy en día, cuando buscamos la oportunidad de descansar, tratamos de que sea en un lugar especial, alejado de distractores y elementos que nos remontan a la rutina de vivir en una ciudad. Y no es que la vida en las metrópolis sea pobre, pero puede ser cansada en muchas ocasiones. De esta manera sobran los resorts y hoteles que prometen experiencias únicas, pero pocos en realidad pueden llenar las expectativas.

Aquí es donde entra Azulik Tulum Eco-Resort, una opción que se toma en serio la meta de brindar una experiencia rodeada de misticismo y tranquilidad, una estancia alejada de todo, inclusive de la misma aprisionante tecnología. El resort se beneficia de la naturaleza para crear bungalows, casas en árboles y villas inspiradas en conceptos artísticos mayas. Eso sin contar que están junto frente al mar, dándole una sensación de encontrarse en una paradisiaca isla, alejada de los problemas y la sociedad misma.

Entre los servicios que podrán encontrar en Azulik, se encuentra un Santuario en donde uno podrá meditar en un domo creado por palapas, disfrutar de un Spa Maya, así como la purificación por parte de un Chamán de la localidad quien, a través de ceremonias sagradas como el cacao o el temazcal, hará que uno se reconecte con la dualidad de la visión del mundo nativo que comprende el cuerpo y el espíritu como un todo. De igual forma hay un espacio dedicado a la creación y venta de artesanía.

Y si eso fuera poco, Azulik tiene un espacio totalmente dedicado al arte, en una apuesta realizada por el bisnieto de la legendaria Peggy Guggenheim, el cual actualmente se encuentra la exposición titulada Configurations, obra en conjunto de los artistas Katinka Bock, Guillaume Leblon y Gabriel Rico. Estas obras estarán disponibles a la apreciación de público hasta el 31 de enero de 2019.

En el apartado gastronómico, el lugar cuenta con 3 restaurantes de diferentes temáticas. El primero es el Kin Toh, una cocina de vanguardia maya-mexicana; el segundo es Tseen-Ja, el cual combina cocina japonesa con productos antiguos mayas y mexicanos; y por último tenemos el Cen-Te, una granja a la mesa que invita al huésped a redescubrir la comida en su forma más pura.

Unos renglones atrás mencionaba las experiencias que ofrece este Eco-Resort, las cuales van desde excursiones guiadas a través de la jungla y las ruinas, natación y exploración en cenotes, así como la posibilidad de deleitarse con masajes terapéuticos, yoga paddle, meditación y deliciosos picnics gourmet. Y para cerrar con broche de oro, Azulik Tulum invita a todos los aventureros a pasar el Año Nuevo en su fiesta New Celebration, evento con el cual buscan crear una cena especial a la luz de la luna, con toda la magia que caracteriza al lugar, para después recibir el Año Nuevo al ritmo de música en vivo. Para todos los interesados les dejamos la información relacionada para que vayan haciendo sus reservas y así poder disfrutar de esta experiencia.

Fuente: Azulik Tulum Eco-Resort